A una escuela primaria acuden estudiantes de la carrera de odontología para exponer a los niños la forma correcta de tener higiene bucal y regalarles cepillos. Son un pequeño grupo de cuatro: Tres mujeres y un hombre, quienes, a su vez, se dividen en parejas. Los cuatro van, como era de esperarse, vestidos por completo de color blanco. Las chicas, peinadas de manera muy sencilla y la cara prácticamente sin maquillar. En el chico, además del color de la ropa, destaca su delgadez, su peinado sencillo pero sin ningún cabello fuera de su lugar. Lucía bien. Al hablar se le notaban (irónicamente) unos dientes un poco descuidados. Hasta aquí nada parece inusual. Pero al exponer, el muchacho habla de una forma inesperada: su timbre de voz es bastante agudo y podría ser un vivo ejemplo de lo que llamamos "afeminado". Los niños que lo escuchan no le dan la más mínima importancia a este hecho y continúan participando y escuchando como si nada.
Tiempo después, cuando los universitarios se habían retirado, una de las docentes les comenta a otras:
—... Yo sí pensé en decirle: "No, amigo, la riegas. Tan guapo que estás. Lástima que seas un desperdicio"...
Mientras tanto, las demás asienten con la cabeza, algunas con risitas incluidas. Claramente haciendo alusión al chico y a su... ¿homosexualidad?
Y es el punto donde me explota la cabeza. Como sociedad, tenemos muchas telarañas en la mente. Primero que nada, me pregunto: ¿Podemos dar por hecho la sexualidad de alguien sólo por la forma en la que habla?
Recordemos que, si hay algo en este mundo, son las diferencias que tenemos entre unos y otros. Diversidad, pues. Nadie tiene las mismas características físicas, gustos, ideas, etc., que el resto. ¿Podemos entonces colocarle un adjetivo a alguien por una cuestión tan simple? Recuerdo que hace unos 20 años, cuando Enrique Iglesias lanzaba su primer disco, él tenía una imagen bastante simple: El cabello semi-largo y semi-peinado, los jeans que se usaban en esa época, los zapatos que tenían cierta altura (casi plataforma) y su suéter holgado, el cual fue, junto a su emblemático lunar en la cara, una de las características que más lo hicieron sobresalir (en la cuestión de la imagen, aclaro). Las niñas se morían por él, se sabían sus canciones, iban a sus conciertos, compraban las revistas donde salía... Y los chicos... Bueno, ellos decían: "Es joto. Trae las mangas del suéter hasta abajo".
¡¿Perdón?! ¿Se le puede llamar así a alguien por cómo se pone la ropa? Y si en un concierto se dobló y levantó las mangas del suéter, ¿se volvió heterosexual? ¿Y si se las dejaba a la mitad? ¿Y si se quitaba el suéter? Son dos claros ejemplos de que no se puede dar por hecho la sexualidad de alguien por características tan particulares, ni mucho menos por unas tan vanas.
Segundo punto: Vamos a suponer que el chico sí es gay. ¿Se le debe considerar un desperdicio? ¿O sólo los gays feos pueden conseguir pareja? ¿Todos los guapos deben ser heterosexuales? Me pongo a pensar en la pobreza de mente de la docente, porque desde mi perspectiva, ella estaba insinuando que si un hombre no se fija en ella, ese hombre no tiene valor alguno. Quizá lo ideal sería que abriera su mente e investigara. Así se daría cuenta de que un gay puede tener todas las mismas características físicas que un heterosexual, que puede hacer las mismas cosas, hablar y moverse de la misma forma, etc. Es decir, QUE NO ES REQUISITO ser afeminado para ser gay ni ser gay para ser afeminado.
Habría ahora que definir la palabra afeminado, para entrar en contexto. Por lo menos en este país (México), se refiere a un hombre cuya forma de hablar, moverse e, incluso, vestirse van más acordes a lo que se espera de una mujer. Sí, de lo que se espera. Recordemos que masculino y femenino, por lo menos en lo que tiene que ver con acciones e imagen, son construcciones sociales. Por lo cual, un hombre con la voz aguda, uno que se viste de rosa, que trata de cuidar su imagen, que muestra su sensibilidad, etc., puede ser considerado afeminado por más de una persona, pero sabemos que NO es así. Es decir, estas características no van a determinar forzosamente si alguien es gay o no.
Sé muy bien que este tema es muy amplio y que hay muchas opiniones al respecto, así que aquí termina esta primera parte. Próximamente vendrá la continuación (para no hacer más larga esta publicación). ¡Gracias por leer!

